Entrar a formar parte de la leyenda
EN 1993, Charles Heidsieck presentó por primera vez el Blanco de Añadas con su prestigiosa añada de 1983. Fue en aquella época cuando se materializaron el savoir faire de la elaboración de los champanes "Blanc de blancs" (el más antiguo data de 1949) y la voluntad de establecer un estilo propio. Desde entonces, la Casa solo ha revelado tres añadas de esta cosecha que tantos premios ha recibido: 1985, 1990 y 1995.
VARIACIÓN DE GRANDES CHARDONNAYS
Solo la variedad Chardonnay entra en la mezcla de esta cosecha de textura excepcional. Entre el abanico de vinos particulares que ofrecen las tierras de la Champaña, se eligieron de forma meticulosa 5 de los principales caldos de la Côte des Blancs, en función de su capacidad para evolucionar, pero también para expresar toda la riqueza de su maduración: Oger por su untuosidad y su estructura, Mesnil-sur-Oger por su equilibrio, Avize por su mineralidad, Cramant por su complejidad y Vertus por su frescor y sus notas florales.
MÁS DE 20 AÑOS de maduración en estas bodegas excepcionales han servido para el desarrollo de un vino espumoso al estilo de la Champaña, para generar esa efervescencia delicada que es tan característica del Blanco de Añadas de 1995 y para alcanzar una untuosidad óptima.

La obra maesra de la Côte des Blancs
A LA VISTA
Un color precioso, de oro dorado, luminoso, 100% Chardonnay. Una efervescencia fina y evanescente, derivada de una maduración excepcional en bodegas galoromanas.
AL OLFATO
Nobleza, elegancia y riqueza de los aromas de frutos secos y de frutos confitados (avellana, almendra, dátil). Un vino para estetas, con aromas profundos y cautivadores de cera de abejas y de turrón.
AL GUSTO
Su textura voluptuosa y cremosa al tiempo que fina es el signo distintivo de este vino, que se completa con una multitud de aromas: caramelo, pieles de cítricos, almendras tostadas… El final consiste en un toque fresco, que acredita el potencial de esta cosecha.